El gobio es uno de los peces más pequeños que se encuentra en aguas argentinas; habita desde el sur de Brasil hasta el norte de Argentina. Se lo puede encontrar en “bochones” de poliquetos de la laguna Mar Chiquita, arrecifes rocosos costeros y en las escolleras del puerto de Mar del Plata. Tiene un comportamiento críptico y cambia su coloración de acuerdo al color del sustrato en el cual vive. En momentos de tranquilidad se desplaza en pequeños tramos o se separa del sustrato para luego dejarse caer lentamente sin ningún movimiento; pero, ante una amenaza, suele huir de un movimiento muy rápido. Utiliza como refugio tubos de poliquetos y pequeñas grietas o cuevas donde puede entrar tanto de cabeza como de cola. Los individuos de mayor talla se caracterizan por ser muy territoriales; ante el acercamiento de otro individuo de la misma especie a su cueva adoptan una postura erguida en la cual se apoyan sobre el sustrato levantando la cabeza y el pedúnculo caudal al mismo tiempo. Si el competidor no retrocede, mantienen la boca abierta y luego lo atacan en un solo movimiento. Pueden ser observados en gran cantidad en un área pequeña. La madurez sexual se observa externamente por el desarrollo de la papila urogenital (protuberancia que rodea los órganos genitales). Aparentemente tendrían cuidado parental de los huevos. Las larvas suelen encontrarse en gran abundancia entre enero y abril en la zona estuarial del Río de la Plata y laguna de Mar Chiquita. Se alimenta básicamente de pequeños invertebrados como crustáceos y poliquetos. La talla máxima observada es de 6 cm. Poseen un cuerpo robusto, cabeza grande y ojos ubicados arriba de la misma. Boca terminal con labios gruesos. Las aletas pélvicas están unidas entre sí formando un disco que le permiten fijarse al sustrato. Las aletas pectorales son redondeadas, al igual que la caudal. El cuerpo presenta una coloración en forma de bandas verticales pardas y gruesas, que se intercalan con otras más angostas de color claro. A lo largo de la línea lateral suele presentar una serie de puntos oscuros. La escamación en esta especie es muy variable, va desde unas pocas escamas en el pedúnculo caudal hasta parches triangulares que llegan hasta la base de la aleta pectoral. Por Matías Delpiani
